sábado, 20 de febrero de 2016

Juguetes anales

Llevo un par de meses obsesionada con la idea de comprarme algún juguete anal, pero quiero ir poco a poco y todo lo que encuentro me parece demasiado grande. No sé por qué. 

Creo que la en cuanto tenga un poco de dinero, me compraré el más pequeño que vi en el último sexshop en el que entré y me haré con él. Al final me encantará lo sé. Porque ya me encanta jugar con mi culo. 

Si de hecho ya me he metido un consolador que, seguramente será hasta más gordo que el plug de la tienda. ¡¡¡Pero es que lo veo y me pone de los nervios!!!! No sé qué tienen en conexión con mi cerebro los plugs...Pero me dan cierto miedo y mucha curiosidad morbosa a la vez. 

¡Es como un chupete para mi culo! Los quiero de esos que tienen una base en el extremo para tener la certeza tanto de que se me quedan dentro como de que me lo podré sacar. Y aún así... Me impone. 

Y diréis... Nunca te han dado por el culo...¡¡Pero la verdad es que sí!!! Una vez. Pero el caso es que tuve dentro de mi culo una polla que estoy segura que era más grande y más gorda que el plug pequeño de la tienda... Pero será que quiero ir yo poco a poco disfrutando y no aterrorizándome que por eso me impacta tanto. 

Sí es verdad que no me desagradó y sentí placer, pero poco tiempo... La verdad, no fue una experiencia del todo buena. Eso pasa cuando la compañía que te está follando es un gilipollas. Pero no es que me haya traumatizado ni nada, si lo quiero probar otra vez durante toda mi vida. Más y más hasta tener controlado mi cuerpo al 100%.  

Pero el plug.... Tiene una extraña influencia en mi psique. 

Si alguien sabe por qué se da esto, que me lo diga, por favor. 

La verdad es que hay todo tipo de plugs. Me hacen mucha gracia los que son con una cola de animal al final del plug.... Para que cuando una zorrita se lo ponga... Pues eso, se vea claro lo que es. Que haya ahí un juego de lo más dominante y excitante me pone. Aunque también pienso en una situación en la que un hombre le enseñe a su putita lo que va a tener puesto... Y ella se muera de la vergüenza. Uff... Tiene que ser horrible y excitante a partes iguales. 
¡Dichosa dicotomía perversa!


2 comentarios:

  1. A nosotras las mariquitas nos vuelve locas este tipo de plugs cielo, pero lo que nos excita es mas que llevarlo puesto en si el hecho de que alguien te obligue a ponerlo mmmm y ya ni te cuento si alguien ( amo o ama ) nos lleva a la tienda a comprarlo y lo pide par anosotras...nos derretimos corazon. Besos.

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    1. Buff ¡¡un montón de sensaciones si lo piden delante tuya entonces!!

      Gracias por el comentario, se agradece.

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