Llevo toda la tarde con una
gargantilla preciosa y gótica.
Todo un reto para mí. Pero lo he
conseguido. Y aún sin que la viese nadie, sólo sintiéndola yo ahí en mi cuello…
Me he sentido fenomenal y tremendamente femenina.
Feliz. Haciéndolo para mí misma y
por nadie más. Entendiéndome y sincerándome con mi alma de mujer.
Pues eso bonita ¿aprieta?
ResponderEliminarNo aprieta. Me siento mejor que nunca: Poderosa, femenina y más atractiva si cabe.
EliminarEstoy incluso deseando que llegue el calor para captar todas las miradas sobre mí.