Sentí una mano en la cabeza y
paramos el beso a la vez. Era Álex acariciándonos a ambos.
-¿Por qué
no me la coméis juntos?
-¿Por
qué no mejor que te la coma él y yo miro?
-Jajajajajajajajaja
Álex pensaba que le iba a seguir
el rollo pero me empezaba a despertar la vena juguetona. Me agarró del pelo por
la nuca y tiró de él fuerte.
-¡¡Ah!!
Le mire y tenía la mirada esa que
indicaba que le había tocado los cojones.
-Que te
la metas en la boca, coño.
Sonreí divertida y él sonrió
algo. Estaba perdiendo la compostura. Se la comí con ganas. Miré hacia mi lado
y vi que el otro se había vuelto a tumbar, a disfrutar de la escena sin más.
Miré a Álex con su falo dentro de
mi boca.
Yo lo quería ya abriéndome entera
con cada embestida, pero debería esperarme una horita más.
Abrí mis piernas para
tocarme. Aquello estaba increíble de
húmedo. Todos mis muslos chorreados. Y necesité tocarme el clítoris. Ufff fue
intenso hacer ese círculo en mi zona sensible. Un par de tocamientos y bajé a
mi vagina. Aún seguía sensible.
-Oye que
no te toques, que te tocamos nosotros.
Me la saqué de la boca.
-Valee…
Dame por favor…
-Hay que
esperar.
-Ya
pero… -Le doy la espalda en la cama poniéndome de rodillas y vuelvo la
cabeza hacia atrás mientras me abro el culo.
-Por
aquí no hay que esperar.
-.Joder… -me
agarra de las caderas poniéndome a su antojo.
Me abre el ojete y escuche en él:
-Nacho
ven aquí y ayúdame.
Se acercó y esparció su saliva moviendo
sus dedos rápidos por él, dándome placer además.
Escupió de nuevo y volvió a hacer
lo mismo. Así entre los dos unas cuantas de veces más.
Qué ganas de que me dieran por el
coño. Lo tenía ardiendo. Pero yo quería que siguieran jugando conmigo.
-Manténle
tú las…
Pasó a ser Nacho quien me
mantenía estirado el culo.
El otro pasó los dedos por él,
luego los bajó suavemente a la fuente de lubricante más grande en esa
habitación y movió sus dedos comprobando. Yo gemí levemente. Luego metió dos
dedos y gemí más alto.
-Calla.
Esas órdenes tontas más
necesitada de falo me ponían. Ellos lo sabían bien los hijosdesumadre.
Luego pasó esos mismos dedos por
mi ano de nuevo. Y luego puso la polla. La punta de su polla. Me estremecí con
cierto “miedo” porque lo tenía muy cerrado.
Él tan solo dejó la punta ahí
para que yo la sintiera y Nacho dejó de sostenerme los cachetes. Álex se
apretaba contra mí dejando mover mis caderas. Sin llegar a metérmela en ningún
momento. Me encanta notar como se me aprieta contra esa zona.
-¿Cuánto
hace que no te follan el culo?
-Muchísimo.
Vuelve a estar virgen.
-*sonido
de babas*
-Joder, ¡yo quiero
destrozárselo!
-Mamón, ¡yo
creo que es justo que sea yo el primero! ¿No crees?
-Pff
Nacho me agarró de la cintura y
me hizo acostarme a su lado para pegarme contra él. Me quejé por haberme
alejado de una dureza en mi culo.
Álex no dijo nada y se tumbó
también a mi lado. Por tanto yo quedaba en medio. Me encanta tener a dos
hombres para mí. Lo bueno de eso es que siempre habrá al menos uno dándome
placer.
-¿No
crees que me merezco yo eso?
-Sí pero joder… es su culo.
-jajaja jajaja
Se acerca a mi oído y me susura: Me muero de ganas de abrírtelo y no sé si prefiero hincártela
de una vez sin pausa aunque me chilles que te duele o… O tal vez ir despacito
como un buen hombre y escucharte ir poco a poco dándote placer.
Ufff de las dos maneras acabaré
viciándome. Aunque preferiría la segunda. No dije nada.
-Una buena comida de culo
es lo que te va a costar.
Eso me despertó enseguida.
Mientras Álex se reía yo le decía:
-¡¡¡OYE!!!
Los miré y jadeando no supe decir
cómo me sentía ante su rollo.
Mirando a Álex me acarició la
cara y el cuerpo y sonriéndome con carisma decía:
-Vaaya,
la putita se nos escandaliza.
Me reí.
-Por
favor cómeme el coño.
-Por
supuesto, nena.
Bajó y me puso la lengua justo
donde tenía que estar y comió con ganas, lamiendo, besando. Ufff me salió un
gemido tan alto y desgarrador.
-Ohhhh
siiii, siii…mmm Oh siii
Le apretaba su cabeza contra mí,
que no se quitase en un rato.
-Fóllameee,
ya ha pasado un buen rato, fóllame.
Me puse a cuatro.
Y él no dudó en hincármela.
-Ohhh
siii siii, máas…ummmm oh máaas… Dios sigueeee… mmmm aaahh.
Bombeando rápido me corrí como
gata en celo.
-¿Más?
-Siii,
no pares ahora..noo.. pares.. mm aahh, ahhhh, aaaaaaaaaaaaaaaaah.
Mis piernas y mi sexo tenían
convulsiones involuntarias mientras me relajaba. Pero él seguía dentro y a los
pocos minutos empezó a sacar su rabo un poco e hincármelo de un golpe.
-¡ah!
No espera…
Otra embestida.
-Ah…espera…mmm
no…
Otra y otra embestida más.
Follándome a un ritmo más lento pero follándome.
-Mmmm
-Ai,
espera… ummm, no.. ahh… mmm
Era una sensación extraña mezcla
de placer, de dolor suave, de placer, de estar sensible y que me siga follando,
de placer pero no del todo, de estar fuera de mi control. Pero si parase, no me
gustaría. Me gusta que haga lo que le dé la gana aunque una parte de mí quiera
que pare. Es difícil y enrevesado, lo sé.
Él siguió hasta que le salió de
sus santos cojones. Porque no llegó a correrse en ese polvo. Volvió su
movimiento lento mientras la tenía clavada y luego la sacó de una vez.
Arggg qué gustazo. Se me caía la
baba.
-Mi turno.
Le miré y él mirando a Álex dijo:
-Ven aquí.
Tanta tontería de chupaditas y meterte un dedo con saliva. Yo quiero que te revienten el culo....pero ya!
ResponderEliminarjajaja lo hicieron. Pero aún no lo he subido. :P
ResponderEliminarYo también quiero leer como te reventaron el culo, porque con tantos capítulos ya supongo que habrá pasado de todo. Sois incansables. Besos donde te duele.
ResponderEliminarVaya tela... Qué malos sois, ¿eh? :P
EliminarTranquilos que no os voy a hacer esperar mucho más.
Besos, Dominus.